Sabanalarga, en sus 276 años de historia, regresa por sus glorias
Con la creación del departamento del Atlántico en 1905, el rol de importancia del municipio se fue quedando en el tiempo. Hoy, la población se proyecta a recuperar su prestancia social, económica y comercial
Las viejas vitrinas acomodadas sigilosamente en un vetusto cuarto de la casa del historiador José Agustín Blanco Barros, ubicada en el centro de la ciudad de Sabanalarga, fueron por épocas un lugar sagrado en donde reposaba gran parte del archivo fotográfico de la historia de la ciudad.
Lázaro Blanco, su hermano, fue el hábil fotógrafo que obturó el lente de su cámara Kodak 35 con carrete, para dejar como evidencia el desarrollo de la naciente ciudad.
Las primeras fotografías incógnitas que se conocieron en la ciudad, años posteriores llegaron a manos del historiador local, Rafael García Hernández, quien las tomó y las guardó como un tesoro preciado, para luego darlas a conocer a la opinión pública local y departamental.
Rafa, las muestra, las da a conocer de nuevo en el cumpleaños 276 de esta población, esas laminas sepias que resguardan fragmentos de la historia de Sabanalarga, la cual se convirtió en un lugar estratégico en el curso de del desarrollo social de Colombia.
Durante el siglo XIX, el municipio experimentó importantes cambios en su desarrollo social, cultural y político.
Iniciados en 1839 con la publicación de Juan José Nieto: ‘Geografía histórica, estadística y local de la provincia de Cartagena, República de la Nueva Granada, descrita por cantones’, en la que declaró que esta tierra “es la ciudad del amor a la ilustración…”, por su vocación al estudio; cuyos hijos impulsaron un proyecto político y económico.
La consolidación de la provincia de Sabanalarga en 1860 como espacio político – administrativo, donde se dieron procesos económicos alrededor de la agricultura, ganadería y el cultivo de la caña de azúcar y la destilación del aguardiente, convirtió a esta población en una de las más importantes del Caribe: inmigrantes judíos comerciantes, europeos y de las Antillas, forjaron el progreso en este siglo. Sabanalarga, fue un epicentro que logró bajo el impulso de su gente un dinamismo que le dio luces en el contexto nacional.
El historiador Xavier Ávila, quien guarda en su archivo personal otra parte de la poca galería fotográfica existente, se centra en esos lustros, los que más se ponderan dentro de la historia, esa que hizo grande a la ciudad en el siglo XVIII y XIX.
Pero el rol de importancia se fue quedando en el tiempo, con la creación del departamento del Atlántico en 1905, porque perdió el espacio político que había ganado al estar más cerca de Cartagena que era el bastión social y económico más importante del Caribe. Barranquilla fue relegando ese periplo de glorias en la ciudad de Sabanalarga, por el desarrollo emergente de la capital del Atlántico.
“Hoy, Sabanalarga se apresta a vivir la nueva era de importancia con la dinámica social y comercial que vive por el posicionamiento geográfico, el cual la ubica de manera privilegiada dentro del departamento y la región Caribe. Sabanalarga está llamada a ser el gran polo de desarrollo de la Región Caribe, ese será nuestro compromiso. Proyectaremos a esta ciudad hacía el repunte de la agroindustria del Atlántico” Jorge Manotas, alcalde del municipio.
Esta nota fue escrita en Enero del 2020, antes de la pandemia.